Sorpréndanse descubriendo que el hielo flota, debido al cambio en la densidad del agua.
¿Sabían que la densidad del agua cambia cuando se encuentra en estado líquido o sólido? A través de una historia muéstrale a tu peque que gracias a este fenómeno, el hielo flota sobre el agua. Sorprendente, ¿verdad?
¡Los hielos nadan este verano!
Observa junto con tu peque, con esta linda historia, que cuando el agua se congela su densidad disminuye. ¡Manos a la obra!
NECESITAMOS:
Agua natural, 1/2 taza de jugo de limón, hojas de menta, moldes para hielo y una jarra de agua
Comienza explicándole a tu peque que la densidad es la que nos permite medir el peso de una sustancia, es decir, qué tan ligero o pesado es. Entre mayor sea la densidad de un objeto, más pesado nos parecerá.
Después cuéntale este dato sorprendente: el agua es la única sustancia que al congelarse disminuye su densidad, o sea que ¡el hielo es más ligero que el agua en estado líquido!
Dile a tu hijo que el molde para hielo será nuestro barquito. Mientras colocas las hojas de menta y el limón en cada uno de los espacios cuéntale que cada hojita es un pasajero ¡Hasta le pueden poner nombres a cada uno! Mételos al congelador hasta que estén listos.
Juega con tu peque a que la jarra con agua es el mar, y que el barco se volteó, dejando caer a los pasajeros (hielos).
Dile que las personas se salvaron y están súper felices nadando, gracias a que la densidad del agua disminuyó cuando se congeló.
- Al terminar la historia disfruten juntos de esta refrescante bebida.
TIP | Pueden crear otros hielitos usando naranja, fresas o yerbabuena, de esa forma, este delicioso aprendizaje nunca terminará.